"Escucha el consejo y acepta la corrección, para que seas sabio el resto de tus días". Proverbios 19:20
¿Cuántas veces hemos cometidos errores?. La respuesta es obvia. Lo interesante es saber: ¿cuánto hemos aprendido de esos errores?. No dudo que la terquedad puede ser un enemigo fuerte para no dejarnos avanzar. Una cosa es ser terco y otra constante. El terco por lo general no oye, el constante está convencido y seguro el camino a transitar.
Más que equivocarse para aprender, es mejor ser prudente en las decisiones a tomar y para ello necesitas ser sabio. Dormir tranquilo es una buena señal para comprender que la vida va por buen camino, siempre que estés atento a la voz de Dios.
Bendiciones
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